Las acciones preferentes STRC recién lanzadas por MicroStrategy podrían haber encontrado realmente la solución óptima para la acumulación de monedas de las empresas.

Su estrategia es muy inteligente: emitieron acciones preferentes a un precio de 50 dólares con un interés anual del 8%, lo que proporciona munición para comprar 487 BTC directamente—la clave es que no afecta para nada a los accionistas comunes. Este método ya ha llamado la atención de los gigantes, BlackRock ha presentado solicitudes con estructuras similares. Incluso Metaplanet ha seguido este camino y ha conseguido financiamiento de 67 millones de dólares.

En otras palabras, este es el plan que cada CFO sueña: establecer un canal de capital perpetuo para Bitcoin, sin tocar la equidad. Cuando puedes seguir ampliando la reserva de BTC sin diluir los derechos de los accionistas, no es un sueño entrar en el S&P 500.

El efecto demostrativo de esta estructura de financiación puede impulsar más la entrada de instituciones que un simple aumento de precios.