Tras cinco años de trabajo en blanco, un DEX líder finalmente ha entendido una cosa: si siguen así, el protocolo será despojado por completo.
La funcionalidad está allí, hay muchos usuarios, y el volumen de transacciones se dispara a diario. ¿Y qué pasa? Todo el dinero se lo llevan los LP y los buscadores, y el propio protocolo ni siquiera prueba la sopa.
Hasta hace poco, el fundador Hayden Adams y un miembro clave de la fundación, Devin Walsh, unieron fuerzas para presentar una propuesta que cambió las reglas del juego: ya no quiero seguir, a partir de ahora hay que pagar para pasar.
Lo más importante es que ese dinero no se mete en las arcas del equipo, sino que se quema en tokens.
Esto no es una simple reparación, sino una reestructuración completa de las reglas del juego desde sus cimientos.
**El protocolo ahora tiene una «válvula de cobro»**
¿Antes cómo funcionaba? Las comisiones de transacción iban enteras a los proveedores de liquidez, el MEV era repartido entre mineros y bots de arbitraje, y la plataforma simplemente hacía de buen samaritano.
Ahora no es así. La capa del protocolo incorpora directamente un interruptor de tarifas, que solo puede activarse mediante votación de los poseedores de tokens. Una vez activado, cada transacción se corta en una pequeña parte, que se envía directamente a una fundición de destrucción.
¿Cómo cobra la versión 2 de los pools? La tarifa para LP se reduce del 0.3% al 0.25%, y el 0.05% restante se quema en el protocolo. La versión 3 es más flexible, con diferentes niveles de tarifas, y el protocolo se lleva entre una sexta y una cuarta parte de las ganancias de los LP, ajustándose según la situación del pool.
La estrategia también es sólida: comenzar con los pools de alto tráfico en la red principal, y luego expandirse lentamente a redes de capa dos, versiones v4 y agregadores—paso a paso, sin ataques sorpresa.
**Recuperar el MEV de las manos de los mineros**
El MEV, en pocas palabras, es el «valor extra que pueden extraer los mineros», y siempre ha sido un punto de sangrado invisible en los DEX. Las grandes operaciones de frontrunning y arbitraje se llevan toda la ganancia fuera de la cadena.
La propuesta de mecanismo de subasta de descuentos en tarifas (PFDA) que lanzaron esta vez es muy sencilla: quien esté dispuesto a pagar más por el derecho de ejecución prioritaria, podrá obtener prioridad en las transacciones.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
19 me gusta
Recompensa
19
7
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
HashBrownies
· hace11h
¿Crees que aprovechar las ofertas es muy bueno? Ya debería haber cobrado.
Ver originalesResponder0
degenwhisperer
· hace15h
¿Finalmente has entendido? Esa forma de hacerlo es la correcta.
Ver originalesResponder0
potentially_notable
· hace15h
Después de tanto tiempo, finalmente me he dado cuenta.
Ver originalesResponder0
GasFeeCrybaby
· hace15h
Finalmente he comenzado a recibir dinero, jajaja. Los que se aprovechan van a llorar.
Ver originalesResponder0
MoneyBurner
· hace15h
Pensé que corría lento, en realidad solo estaba construyendo mi posición.
Tras cinco años de trabajo en blanco, un DEX líder finalmente ha entendido una cosa: si siguen así, el protocolo será despojado por completo.
La funcionalidad está allí, hay muchos usuarios, y el volumen de transacciones se dispara a diario. ¿Y qué pasa? Todo el dinero se lo llevan los LP y los buscadores, y el propio protocolo ni siquiera prueba la sopa.
Hasta hace poco, el fundador Hayden Adams y un miembro clave de la fundación, Devin Walsh, unieron fuerzas para presentar una propuesta que cambió las reglas del juego: ya no quiero seguir, a partir de ahora hay que pagar para pasar.
Lo más importante es que ese dinero no se mete en las arcas del equipo, sino que se quema en tokens.
Esto no es una simple reparación, sino una reestructuración completa de las reglas del juego desde sus cimientos.
**El protocolo ahora tiene una «válvula de cobro»**
¿Antes cómo funcionaba? Las comisiones de transacción iban enteras a los proveedores de liquidez, el MEV era repartido entre mineros y bots de arbitraje, y la plataforma simplemente hacía de buen samaritano.
Ahora no es así. La capa del protocolo incorpora directamente un interruptor de tarifas, que solo puede activarse mediante votación de los poseedores de tokens. Una vez activado, cada transacción se corta en una pequeña parte, que se envía directamente a una fundición de destrucción.
¿Cómo cobra la versión 2 de los pools? La tarifa para LP se reduce del 0.3% al 0.25%, y el 0.05% restante se quema en el protocolo.
La versión 3 es más flexible, con diferentes niveles de tarifas, y el protocolo se lleva entre una sexta y una cuarta parte de las ganancias de los LP, ajustándose según la situación del pool.
La estrategia también es sólida: comenzar con los pools de alto tráfico en la red principal, y luego expandirse lentamente a redes de capa dos, versiones v4 y agregadores—paso a paso, sin ataques sorpresa.
**Recuperar el MEV de las manos de los mineros**
El MEV, en pocas palabras, es el «valor extra que pueden extraer los mineros», y siempre ha sido un punto de sangrado invisible en los DEX. Las grandes operaciones de frontrunning y arbitraje se llevan toda la ganancia fuera de la cadena.
La propuesta de mecanismo de subasta de descuentos en tarifas (PFDA) que lanzaron esta vez es muy sencilla: quien esté dispuesto a pagar más por el derecho de ejecución prioritaria, podrá obtener prioridad en las transacciones.