El espacio cripto está perdiendo talento — y no es lo que piensas.

Claro, todos hablan sobre el esfuerzo implacable. Las noches sin dormir, la presión constante. Pero esa no es la razón por la que los mejores ingenieros están renunciando.

Es lo que están construyendo lo que los rompe.

Mentes brillantes vertiendo energía en productos que se sienten vacíos. Proyectos que persiguen ciclos de hype en lugar de resolver problemas reales. Cuando tu mejor trabajo se reduce a mecánicas de pump-and-dump, el agotamiento no se trata de horas, sino de significado.

El verdadero éxodo no es por agotamiento. Es por desilusión.