La verdad, estar pendiente de las actas de la Reserva Federal, estudiando los movimientos del Banco de Japón, persiguiendo todo tipo de noticias... Este tipo de juego me hace sentir más como un jugador.

Sí, como ese tipo de jugador que depende completamente de la suerte. Es incluso más emocionante que cuando me lanzo a por memecoins, y también me hace darme cuenta con claridad de que soy un auténtico novato.

Con las memecoins al menos puedes analizar el gráfico tú mismo, juzgar la distribución de los tokens, tienes algo de iniciativa. ¿En el mercado secundario? Tras unos días observando, la sensación es que eres un mono al que llevan de la nariz: si quieren que suba, sube; si quieren que baje, baja. Te manejan por completo.