La Casa Blanca acaba de soltar una orden ejecutiva que impulsa una plataforma de IA unificada en las agencias federales. Mientras tanto, el agresivo derroche en IA de Alphabet ha llevado a los analistas a observar un posible hito de valoración de $4 billones. Dos movimientos masivos que están sacudiendo el panorama tecnológico—uno desde los corredores del gobierno, el otro desde los balances de Silicon Valley. La carrera por dominar la infraestructura de inteligencia artificial se está intensificando en múltiples frentes.