Cuando Bitcoin aún era un misterio para la mayoría de los hablantes de chino, una persona decidió puentear esa brecha. El tipo que más tarde ayudaría a construir una de las mayores empresas de hardware de minería asumió un proyecto que lo cambió todo: traducir el whitepaper de Satoshi al chino.

Esto no fue solo un trabajo de traducción aleatorio. En un momento en que los medios chinos no podían decidir si Bitcoin era una estafa o una revolución, alguien con conocimientos técnicos realmente se sentó y hizo que el documento fuera accesible. Esa persona cofundó una importante empresa de hardware de minería y ahora preside una plataforma de activos digitales.

La traducción se convirtió en un texto fundamental para toda la comunidad cripto de habla china. Es increíble pensar cómo un documento, correctamente traducido, ayudó a desencadenar todo un ecosistema. A veces, los movimientos más impactantes no son los más llamativos.