La fase de incredulidad ha terminado: los grandes jugadores ya no dudan.

Las instituciones ya han empezado a acumular discretamente, mientras que la mayoría de los minoristas aún están indecisos y esperando al margen.

La energía de “solo sube” ha vuelto, y esta vez los fundamentales realmente respaldan un sólido primer trimestre de 2026.

Por ejemplo: los datos de la CME ahora muestran una probabilidad del 88,4% de un recorte de tipos en diciembre, con solo 3 días restantes antes de la reunión.

Los mercados lo están tratando como casi confirmado, un importante viento de cola alcista tanto para las acciones como para las criptomonedas.

Los próximos meses separarán a quienes capitalicen la tendencia de quienes acaben siendo liquidez de salida.