Ayer, nada más abrir el mercado estadounidense, las acciones se dispararon y el BTC también despegó —¿la razón? En EE. UU. se ha pulsado oficialmente el botón de pausa en la reducción del balance.

En pocas palabras, el Bitcoin es el termómetro de la liquidez. En cuanto se detiene la reducción, el precio reacciona al instante. Esta subida se debe más a la emoción que a otra cosa; el mercado especula sobre si la Reserva Federal abrirá realmente el grifo del dinero, y ni siquiera las noticias de la subida de tipos en Japón han podido frenar este optimismo.

Pero, dicho esto, hasta que la liquidez real y sólida no regrese, este movimiento parece más bien un rebote técnico. ¿Un cambio de tendencia definitivo? Todavía queda mucho para eso.

¿Quién será el próximo presidente de la Reserva Federal? Trump dejó caer una pista en su discurso de ayer: anunciarán al candidato a principios del año que viene. Incluso mencionó que "uno de los candidatos potenciales está presente aquí", una referencia bastante obvia, dejando entrever que Hassett será el relevo. Retrasar el anuncio hasta el año que viene probablemente sea para dar tiempo a todos los procesos de revisión tras la nominación.

A nivel de datos, también hay movimiento: el 1 de diciembre la Reserva Federal realizó una operación de recompra a un día por 13.500 millones de dólares, el volumen más grande desde la pandemia de 2020, e incluso superior al de la burbuja puntocom de 2000. La señal de inyección de liquidez es más que clara.

Musk ha vuelto a hacer declaraciones recientemente. Ha mencionado esa bomba de relojería de la deuda de 38,3 billones de dólares y considera que podría provocar una gran volatilidad en el precio de Bitcoin. Su lógica es curiosa: "En el futuro, el concepto de 'dinero' desaparecerá; la energía será la verdadera moneda fuerte. Bitcoin se basa en la energía y no puedes crear energía de la nada con una ley".

También predice que, en tres años, la IA hará que la oferta de bienes y servicios... (El contenido de la entrevista continúa)