# Tanques de Silicio: la teoría francesa — cómo los filósofos predijeron Web3
La filosofía francesa de la posguerra puede parecer un juego intelectual sofisticado, desconectado de la realidad objetiva. Sin embargo, en realidad autores como Gilles Deleuze, Michel Foucault, Jean Baudrillard, buscaban explicar las nuevas formas de relación que se estaban formando entre el ser humano, el Estado y los medios de comunicación.
Retrospectivamente, en sus obras se pueden encontrar también descripciones de internet, las cadenas algorítmicas, el blockchain, y sus observaciones son útiles para analizar la descentralización, los metaversos y el control digital.
ForkLog analizó cómo las ideas de los teóricos franceses del siglo XX pueden explicar el estado actual de Web3.
Deleuze y Guattari: rizoma versus árbol
En 1980 se publicó «Mil mesetas», del filósofo Gilles Deleuze y el psicoanalista Félix Guattari. Sus autores contrastaron dos estructuras de organización social y de información: la estructura en (árbol), jerárquica, y la estructura (rizomática), en red.
El modelo “en árbol” implica una raíz, un tronco y ramas, es decir, una jerarquía estricta. Así funcionan los servidores centralizados, empresas como Google o Amazon, los sistemas bancarios. Los datos fluyen del administrador al usuario. La vulnerabilidad de este sistema es evidente: un golpe en la raíz (del servidor) destruye toda la estructura.
El rizoma (hongo) funciona de otra manera. No tiene centro, principio ni fin. Cualquier punto puede conectarse con cualquier otro. Si se rompe una conexión, el sistema se reconfigura y continúa funcionando.
Blockchain como variante del rizoma
La arquitectura de Bitcoin tiene rasgos rizomáticos. En una red (P2P), donde cada nodo (nodo) es igual, no hay control central. La ausencia de un «servidor principal» la hace resistente a la censura y ataques.
Pero los proyectos cripto actuales a menudo son criticados por «traicionar el rizoma». El uso de gateways centralizados como Infura para Ethereum, o stablecoins con bloqueo de direcciones como (USDT, USDC), y las plataformas centralizadas (CEX), devuelve a la industria a una estructura jerárquica.
Deleuze y Guattari advertían: el rizoma puede endurecerse y convertirse en árbol si aparecen nodos de poder. Esto es exactamente lo que se observa ahora en los debates sobre regulación de DeFi.
El desarrollo de las DAO — intento de devolver el control rizomático, eliminando la verticalidad corporativa.
Baudrillard: la muerte de la realidad
Jean Baudrillard no vivió la era de DeFi y NFT, pero describió la mecánica de su funcionamiento mucho antes de que apareciera el bloque génesis de Bitcoin. Su libro «Simulacros y simulación» (1981) fue fuente de inspiración para los creadores de la película «Matrix», pero la realidad resultó ser más compleja que la ficción.
Evolución del signo
El concepto central de la filosofía de Baudrillard es el simulacro. Es una copia que no tiene original en la realidad. El filósofo identificó cuatro etapas en la evolución del signo, que pueden traducirse a la esfera financiera:
El signo refleja la realidad básica (una moneda de oro tiene valor por el metal).
El signo oculta y distorsiona la realidad (dinero en papel, parcialmente respaldado por oro).
El signo oculta la ausencia de realidad (dinero fiat, emitido sin respaldo).
El signo no tiene relación con la realidad, es un simulacro puro (criptomonedas).
Baudrillard afirmaba: en la era posmoderna, el mapa precede al territorio, los signos producen la realidad, no al revés. En el contexto de blockchain, esto significa que el código es primario. Un smart contract no describe un acuerdo, sino que crea su realidad. Bitcoin se ha convertido en un simulacro perfecto: el activo no representa dólares o oro, sino que solo hace referencia a sí mismo y a la complejidad de los cálculos de la red.
Para el inversor en cripto, esto explica la naturaleza de la volatilidad. El mercado no cae por fallos en las fábricas, sino por la destrucción del relato (historia).
NFT, metaversos, IA
Internet es una fábrica de simulacros, y los NFT son un ejemplo. Al comprar una imagen de un mono, el usuario adquiere no un objeto ni siquiera derechos de autor, sino un registro en un sistema que apunta a otro registro. Es un signo que remite a otro signo. El valor se construye únicamente sobre la fe de la comunidad, sin vínculo con un activo físico o trabajo (en sentido clásico).
Los metaversos son la encarnación de la «hiperrealidad» según Baudrillard. Es un entorno donde la simulación se vuelve más real que el mundo físico. Los usuarios gastan dinero real en ropa digital para avatares. Así, la (cifra) reemplaza la tierra (el mundo físico).
La IA generativa produce contenido sin autor humano, sin basarse en experiencias vividas. Internet se llena de textos e imágenes que parecen reales, pero detrás no hay sujeto. El espacio informativo se colapsa: distinguir verdad de mentira se vuelve cada vez más difícil.
Foucault: la sociedad panóptica transparente
Michel Foucault analizó la naturaleza del poder y el control. En su libro «Vigilar y castigar» (1975) abordó el panóptico — el diseño de una «prisión ideal» propuesto a finales del siglo XVIII por el filósofo-utilitarista Jeremy Bentham.
Centro de rehabilitación de Stateville, Illinois. Fuente: Foster/White Gallery. En el panóptico, el guardia está en el centro y las celdas rodean el espacio. Los presos no ven al vigilante, pero saben que pueden ser observados en cualquier momento. Esto los obliga a comportarse con disciplina constante: el poder se vuelve automático y sin corporeidad.
Internet se convirtió en un panóptico global. Las redes sociales, los rastreadores y las cookies recopilan información de forma continua. El usuario no sabe cuándo un algoritmo analiza su comportamiento, por lo que se ve obligado a (conscientemente o no) a ajustar sus acciones. La introducción de procedimientos KYC y AML en las plataformas cripto extiende el panóptico al ámbito financiero.
Blockchain como herramienta de vigilancia
La paradoja del blockchain radica en su dualidad. Por un lado, es una herramienta de libertad (nadie puede bloquear una transacción de Bitcoin). Por otro, el registro público es un sueño para los supervisores estatales. Todas las transacciones quedan registradas para siempre, las empresas analíticas marcan las wallets, haciendo la vida financiera transparente.
Con la introducción de las CBDC, el Estado puede no solo ver el movimiento de fondos en tiempo real, sino también programar el dinero — por ejemplo, prohibiendo gastos en ciertos productos o estableciendo fechas de vencimiento de la moneda.
La respuesta es la criptografía de conocimiento cero (ZK). La tecnología permite demostrar la veracidad de una afirmación (por ejemplo, «tengo fondos»), sin revelar los datos en sí. Es un intento técnico de romper las paredes del panóptico.
Virilio: dromología y la inexorable falla
Los conceptos centrales en la filosofía de Paul Virilio son la velocidad y el accidente. Afirmaba que las tecnologías no solo amplían las capacidades humanas, sino que también generan nuevos tipos de catástrofes:
«Inventas un barco, inventas un naufragio. Inventas un avión, inventas un accidente aéreo».
Velocidad de la luz y el trading algorítmico
En el ensayo «Velocidad y política» (1977), Virilio introduce la «dromología», que describe los principios de organización de la sociedad moderna. Según el filósofo, el poder absoluto depende directamente, por ejemplo, de la rapidez en la transmisión de datos.
El trading de alta frecuencia (HFT) y los bots MEV en blockchain explotan microsegundos. El ser humano queda excluido del proceso de decisión, ya que no puede reaccionar a esa velocidad. El poder pasa a los algoritmos.
Accidente integral
Virilio también describió la «falla integral» — una catástrofe que ocurre en todos lados simultáneamente, por la conectividad global del sistema.
El colapso del ecosistema Terra es un ejemplo. La rápida propagación del pánico y las liquidaciones en cascada colapsaron mercados en minutos. Los smart contracts ejecutan código automáticamente e instantáneamente, sin tiempo para corregir errores.
Mientras las finanzas tradicionales tienen «frenos» (páusas en el comercio), en DeFi se opera en tiempo real 24/7. Según Virilio, estamos construyendo un sistema cuya falla será global e instantánea.
Debord: la sociedad del espectáculo y la tokenización de la atención
Guy Debord en 1967 publicó «La sociedad del espectáculo». Su tesis principal: «Todo lo que antes se vivía directamente, ahora se representa». La existencia fue reemplazada por la posesión, y la posesión por la apariencia.
Economía de la atención
En internet, el bien no es el contenido, sino la atención del usuario. Las redes sociales convirtieron la vida en un performance infinito para ganar capital social (likes). Las criptomonedas monetizaron este proceso.
Los tokens de gobernanza, POAP, NFT-avatars — son herramientas de «la sociedad del espectáculo». La gente compra JPEGs caros no por arte, sino para demostrar estatus en la comunidad digital. El valor especulativo de los activos suele mantenerse solo por el hype y la apariencia visual, desconectada de utilidad tecnológica.
Según Debord, el espectáculo no es solo un conjunto de imágenes, sino una relación social mediada por ellas. En Web3, estas relaciones están mediadas por tokens.
Latour: la teoría actor-red
Aunque Bruno Latour es principalmente sociólogo, sus ideas son cruciales para entender los smart contracts. En la teoría actor-red (ANT), no hay diferencia entre personas y objetos. Ambos son «actantes», actores que actúan.
Código como actor
En el derecho tradicional, el sujeto es el humano. En Ethereum, el smart contract actúa de forma autónoma. Guarda fondos, toma decisiones y ejecuta transacciones sin intervención de un operador. El código se convierte en un actor completo de la red.
Tras el hackeo de The DAO en 2016 surgió un dilema filosófico-legal: el hacker simplemente usó las capacidades del código. Desde la perspectiva de Latour, código, hacker y la comunidad de Ethereum (que decidió hacer el hard fork) son agentes iguales, que configuran la realidad mediante interacción. La tecnología dejó de ser una herramienta neutral, dictando las reglas del juego.
Liotard: fin de los grandes relatos
En «La condición posmoderna» (1979), Jean-François Lyotard proclamó la muerte de los «metarrelatos» — grandes ideologías que explican todo (religión, comunismo, progreso). En su lugar, surgen los juegos lingüísticos locales y los pequeños relatos.
Bitcoin como rechazo a la narrativa estatal
La primera criptomoneda surgió en un momento de crisis de confianza en el metarrelato financiero. Los activos digitales ofrecen múltiples «pequeñas narrativas»: cada blockchain tiene su propia filosofía, comunidad y reglas de consenso. No hay una única verdad, solo acuerdo dentro de cada red.
Pero ahora hay intentos de crear nuevos metarrelatos: «Web3 salvará al mundo», «Bitcoin es el oro digital». Lyotard advirtió contra la fe en conceptos universales de salvación.
Síntesis: el futuro a través de la óptica de la teoría francesa
El análisis de las ideas de los filósofos franceses permite extraer varias conclusiones sobre la dirección del desarrollo tecnológico:
Lucha por la estructura: crece el conflicto entre rizoma (DeFi) y árbol (CEX y corporaciones). Las tecnologías tenderán hacia la descentralización, mientras Estados y capital buscan capturar nodos clave.
Hiperrealidad gana terreno: el avance de IA y metaversos hará que la diferencia entre original y copia sea insignificante. La pregunta «¿es real o un deepfake?» perderá relevancia; lo importante será la efectividad del impacto del contenido.
Fin de la privacidad: el panóptico se perfecciona. La criptografía será la única protección. La confidencialidad pasará de ser un derecho a una prerrogativa que requiere conocimientos técnicos.
La velocidad como amenaza: el aumento en la capacidad de procesamiento de bloques y la velocidad del trading incrementan el riesgo de colapsos sistémicos instantáneos. La seguridad requerirá ralentizar, lo cual contraviene la lógica del mercado.
Los pensadores franceses demostraron que la tecnología no es neutral. Internet, concebido como espacio de libertad, lleva en su interior genes de control y simulación. Entender estos conceptos filosóficos es fundamental para desarrolladores y usuarios, no para debates académicos, sino para interactuar conscientemente con la realidad digital. De lo contrario, corremos el riesgo de disolvernos definitivamente en el código, convirtiéndonos en simples terminales para la circulación de datos.
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Tanques de silicio: la teoría francesa — cómo los filósofos predijeron Web3 - ForkLog: criptomonedas, IA, singularidad, futuro
La filosofía francesa de la posguerra puede parecer un juego intelectual sofisticado, desconectado de la realidad objetiva. Sin embargo, en realidad autores como Gilles Deleuze, Michel Foucault, Jean Baudrillard, buscaban explicar las nuevas formas de relación que se estaban formando entre el ser humano, el Estado y los medios de comunicación.
Retrospectivamente, en sus obras se pueden encontrar también descripciones de internet, las cadenas algorítmicas, el blockchain, y sus observaciones son útiles para analizar la descentralización, los metaversos y el control digital.
ForkLog analizó cómo las ideas de los teóricos franceses del siglo XX pueden explicar el estado actual de Web3.
Deleuze y Guattari: rizoma versus árbol
En 1980 se publicó «Mil mesetas», del filósofo Gilles Deleuze y el psicoanalista Félix Guattari. Sus autores contrastaron dos estructuras de organización social y de información: la estructura en (árbol), jerárquica, y la estructura (rizomática), en red.
El modelo “en árbol” implica una raíz, un tronco y ramas, es decir, una jerarquía estricta. Así funcionan los servidores centralizados, empresas como Google o Amazon, los sistemas bancarios. Los datos fluyen del administrador al usuario. La vulnerabilidad de este sistema es evidente: un golpe en la raíz (del servidor) destruye toda la estructura.
El rizoma (hongo) funciona de otra manera. No tiene centro, principio ni fin. Cualquier punto puede conectarse con cualquier otro. Si se rompe una conexión, el sistema se reconfigura y continúa funcionando.
Blockchain como variante del rizoma
La arquitectura de Bitcoin tiene rasgos rizomáticos. En una red (P2P), donde cada nodo (nodo) es igual, no hay control central. La ausencia de un «servidor principal» la hace resistente a la censura y ataques.
Pero los proyectos cripto actuales a menudo son criticados por «traicionar el rizoma». El uso de gateways centralizados como Infura para Ethereum, o stablecoins con bloqueo de direcciones como (USDT, USDC), y las plataformas centralizadas (CEX), devuelve a la industria a una estructura jerárquica.
Deleuze y Guattari advertían: el rizoma puede endurecerse y convertirse en árbol si aparecen nodos de poder. Esto es exactamente lo que se observa ahora en los debates sobre regulación de DeFi.
El desarrollo de las DAO — intento de devolver el control rizomático, eliminando la verticalidad corporativa.
Baudrillard: la muerte de la realidad
Jean Baudrillard no vivió la era de DeFi y NFT, pero describió la mecánica de su funcionamiento mucho antes de que apareciera el bloque génesis de Bitcoin. Su libro «Simulacros y simulación» (1981) fue fuente de inspiración para los creadores de la película «Matrix», pero la realidad resultó ser más compleja que la ficción.
Evolución del signo
El concepto central de la filosofía de Baudrillard es el simulacro. Es una copia que no tiene original en la realidad. El filósofo identificó cuatro etapas en la evolución del signo, que pueden traducirse a la esfera financiera:
Baudrillard afirmaba: en la era posmoderna, el mapa precede al territorio, los signos producen la realidad, no al revés. En el contexto de blockchain, esto significa que el código es primario. Un smart contract no describe un acuerdo, sino que crea su realidad. Bitcoin se ha convertido en un simulacro perfecto: el activo no representa dólares o oro, sino que solo hace referencia a sí mismo y a la complejidad de los cálculos de la red.
Para el inversor en cripto, esto explica la naturaleza de la volatilidad. El mercado no cae por fallos en las fábricas, sino por la destrucción del relato (historia).
NFT, metaversos, IA
Internet es una fábrica de simulacros, y los NFT son un ejemplo. Al comprar una imagen de un mono, el usuario adquiere no un objeto ni siquiera derechos de autor, sino un registro en un sistema que apunta a otro registro. Es un signo que remite a otro signo. El valor se construye únicamente sobre la fe de la comunidad, sin vínculo con un activo físico o trabajo (en sentido clásico).
Los metaversos son la encarnación de la «hiperrealidad» según Baudrillard. Es un entorno donde la simulación se vuelve más real que el mundo físico. Los usuarios gastan dinero real en ropa digital para avatares. Así, la (cifra) reemplaza la tierra (el mundo físico).
La IA generativa produce contenido sin autor humano, sin basarse en experiencias vividas. Internet se llena de textos e imágenes que parecen reales, pero detrás no hay sujeto. El espacio informativo se colapsa: distinguir verdad de mentira se vuelve cada vez más difícil.
Foucault: la sociedad panóptica transparente
Michel Foucault analizó la naturaleza del poder y el control. En su libro «Vigilar y castigar» (1975) abordó el panóptico — el diseño de una «prisión ideal» propuesto a finales del siglo XVIII por el filósofo-utilitarista Jeremy Bentham.
Internet se convirtió en un panóptico global. Las redes sociales, los rastreadores y las cookies recopilan información de forma continua. El usuario no sabe cuándo un algoritmo analiza su comportamiento, por lo que se ve obligado a (conscientemente o no) a ajustar sus acciones. La introducción de procedimientos KYC y AML en las plataformas cripto extiende el panóptico al ámbito financiero.
Blockchain como herramienta de vigilancia
La paradoja del blockchain radica en su dualidad. Por un lado, es una herramienta de libertad (nadie puede bloquear una transacción de Bitcoin). Por otro, el registro público es un sueño para los supervisores estatales. Todas las transacciones quedan registradas para siempre, las empresas analíticas marcan las wallets, haciendo la vida financiera transparente.
Con la introducción de las CBDC, el Estado puede no solo ver el movimiento de fondos en tiempo real, sino también programar el dinero — por ejemplo, prohibiendo gastos en ciertos productos o estableciendo fechas de vencimiento de la moneda.
La respuesta es la criptografía de conocimiento cero (ZK). La tecnología permite demostrar la veracidad de una afirmación (por ejemplo, «tengo fondos»), sin revelar los datos en sí. Es un intento técnico de romper las paredes del panóptico.
Virilio: dromología y la inexorable falla
Los conceptos centrales en la filosofía de Paul Virilio son la velocidad y el accidente. Afirmaba que las tecnologías no solo amplían las capacidades humanas, sino que también generan nuevos tipos de catástrofes:
Velocidad de la luz y el trading algorítmico
En el ensayo «Velocidad y política» (1977), Virilio introduce la «dromología», que describe los principios de organización de la sociedad moderna. Según el filósofo, el poder absoluto depende directamente, por ejemplo, de la rapidez en la transmisión de datos.
El trading de alta frecuencia (HFT) y los bots MEV en blockchain explotan microsegundos. El ser humano queda excluido del proceso de decisión, ya que no puede reaccionar a esa velocidad. El poder pasa a los algoritmos.
Accidente integral
Virilio también describió la «falla integral» — una catástrofe que ocurre en todos lados simultáneamente, por la conectividad global del sistema.
El colapso del ecosistema Terra es un ejemplo. La rápida propagación del pánico y las liquidaciones en cascada colapsaron mercados en minutos. Los smart contracts ejecutan código automáticamente e instantáneamente, sin tiempo para corregir errores.
Mientras las finanzas tradicionales tienen «frenos» (páusas en el comercio), en DeFi se opera en tiempo real 24/7. Según Virilio, estamos construyendo un sistema cuya falla será global e instantánea.
Debord: la sociedad del espectáculo y la tokenización de la atención
Guy Debord en 1967 publicó «La sociedad del espectáculo». Su tesis principal: «Todo lo que antes se vivía directamente, ahora se representa». La existencia fue reemplazada por la posesión, y la posesión por la apariencia.
Economía de la atención
En internet, el bien no es el contenido, sino la atención del usuario. Las redes sociales convirtieron la vida en un performance infinito para ganar capital social (likes). Las criptomonedas monetizaron este proceso.
Los tokens de gobernanza, POAP, NFT-avatars — son herramientas de «la sociedad del espectáculo». La gente compra JPEGs caros no por arte, sino para demostrar estatus en la comunidad digital. El valor especulativo de los activos suele mantenerse solo por el hype y la apariencia visual, desconectada de utilidad tecnológica.
Según Debord, el espectáculo no es solo un conjunto de imágenes, sino una relación social mediada por ellas. En Web3, estas relaciones están mediadas por tokens.
Latour: la teoría actor-red
Aunque Bruno Latour es principalmente sociólogo, sus ideas son cruciales para entender los smart contracts. En la teoría actor-red (ANT), no hay diferencia entre personas y objetos. Ambos son «actantes», actores que actúan.
Código como actor
En el derecho tradicional, el sujeto es el humano. En Ethereum, el smart contract actúa de forma autónoma. Guarda fondos, toma decisiones y ejecuta transacciones sin intervención de un operador. El código se convierte en un actor completo de la red.
Tras el hackeo de The DAO en 2016 surgió un dilema filosófico-legal: el hacker simplemente usó las capacidades del código. Desde la perspectiva de Latour, código, hacker y la comunidad de Ethereum (que decidió hacer el hard fork) son agentes iguales, que configuran la realidad mediante interacción. La tecnología dejó de ser una herramienta neutral, dictando las reglas del juego.
Liotard: fin de los grandes relatos
En «La condición posmoderna» (1979), Jean-François Lyotard proclamó la muerte de los «metarrelatos» — grandes ideologías que explican todo (religión, comunismo, progreso). En su lugar, surgen los juegos lingüísticos locales y los pequeños relatos.
Bitcoin como rechazo a la narrativa estatal
La primera criptomoneda surgió en un momento de crisis de confianza en el metarrelato financiero. Los activos digitales ofrecen múltiples «pequeñas narrativas»: cada blockchain tiene su propia filosofía, comunidad y reglas de consenso. No hay una única verdad, solo acuerdo dentro de cada red.
Pero ahora hay intentos de crear nuevos metarrelatos: «Web3 salvará al mundo», «Bitcoin es el oro digital». Lyotard advirtió contra la fe en conceptos universales de salvación.
Síntesis: el futuro a través de la óptica de la teoría francesa
El análisis de las ideas de los filósofos franceses permite extraer varias conclusiones sobre la dirección del desarrollo tecnológico:
Los pensadores franceses demostraron que la tecnología no es neutral. Internet, concebido como espacio de libertad, lleva en su interior genes de control y simulación. Entender estos conceptos filosóficos es fundamental para desarrolladores y usuarios, no para debates académicos, sino para interactuar conscientemente con la realidad digital. De lo contrario, corremos el riesgo de disolvernos definitivamente en el código, convirtiéndonos en simples terminales para la circulación de datos.