Jerome Powell acaba de anunciar una reducción de tasa de un cuarto de punto, pero aquí viene lo interesante: los funcionarios de la Fed están lejos de estar unidos sobre hacia dónde se dirigen las tasas a continuación.

El banco central está haciendo una reducción de 25 puntos básicos y al mismo tiempo poniendo freno a futuras bajadas. ¿Por qué? Están esperando a ver cómo se comporta la inflación y si el mercado laboral se mantiene estable o se deteriora.

Esta división entre los responsables de la política monetaria importa más que la propia bajada. Algunos ven presiones de precios persistentes, otros temen una suavización del empleo. Por ahora, la Fed está jugando a esperar y ver, lo que significa que la volatilidad podría mantenerse en los activos de riesgo mientras los mercados digieren este giro cauteloso.