Según BlockBeats, el 26 de julio, el senador estadounidense Roger Marshall se retiró del proyecto de ley de Prevención del blanqueo de capitales que inicialmente presentó en conjunto con la senadora demócrata Elizabeth Warren, convirtiéndose así en el primer co-patrocinador en hacerlo. Warren y Marshall presentaron por primera vez el proyecto de ley en diciembre de 2022, con el objetivo de fortalecer las reglas de Prevención del blanqueo de capitales de activo digital en los Estados Unidos. El proyecto de ley fue reintroducido en julio de 2023 y recibió el respaldo del Instituto de Política Bancaria, que representa a gigantes bancarios como el Banco de América y Citigroup. Sin embargo, la industria de la encriptación ha estado en contra de este proyecto de ley durante mucho tiempo, insinuando que sería ineficaz en términos de descentralización financiera, y que una supervisión excesiva en este ámbito sofocaría la innovación.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
El senador Roger Marshall ha retirado su apoyo a la propuesta conjunta de la ley estadounidense de encriptación contra el blanqueo de capitales.
Según BlockBeats, el 26 de julio, el senador estadounidense Roger Marshall se retiró del proyecto de ley de Prevención del blanqueo de capitales que inicialmente presentó en conjunto con la senadora demócrata Elizabeth Warren, convirtiéndose así en el primer co-patrocinador en hacerlo. Warren y Marshall presentaron por primera vez el proyecto de ley en diciembre de 2022, con el objetivo de fortalecer las reglas de Prevención del blanqueo de capitales de activo digital en los Estados Unidos. El proyecto de ley fue reintroducido en julio de 2023 y recibió el respaldo del Instituto de Política Bancaria, que representa a gigantes bancarios como el Banco de América y Citigroup. Sin embargo, la industria de la encriptación ha estado en contra de este proyecto de ley durante mucho tiempo, insinuando que sería ineficaz en términos de descentralización financiera, y que una supervisión excesiva en este ámbito sofocaría la innovación.