Un caso destacado ha surgido de los registros judiciales: un heredero de la fortuna Hermès colocó acciones heredadas en tres instituciones bancarias suizas, confiando en la orientación de Eric Freymond, un gestor de patrimonio suizo con el que había trabajado durante casi dos décadas. Lo que siguió fue inesperado: las acciones simplemente desaparecieron. El incidente plantea serias preguntas sobre la custodia de activos y los riesgos de confiar en los sistemas bancarios tradicionales para salvaguardar participaciones sustanciales. Para quienes gestionan carteras significativas, ya sea a través de canales convencionales o digitales, el caso subraya una realidad dura: incluso las relaciones establecidas y duraderas con instituciones financieras no garantizan la seguridad. Es un recordatorio de que la confianza institucional, aunque a veces necesaria, tiene sus propias vulnerabilidades.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
12 me gusta
Recompensa
12
8
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
Lonely_Validator
· 12-16 00:02
Vaya, ¿así se ha ido la confianza de 20 años? Realmente increíble, qué irónico.
Ver originalesResponder0
PortfolioAlert
· 12-14 22:14
¡Dios mío, la acción del heredero de Hermès simplemente desapareció? 20 años de relación de confianza se derrumban en un instante, qué risa, esto es realmente una "crisis de confianza"
Ver originalesResponder0
OnchainHolmes
· 12-14 17:09
Veinte años de relación y no pude mantener ni un montón de acciones, esto es lo que llaman confianza institucional.
Ver originalesResponder0
SleepyValidator
· 12-14 17:09
Vaya, esto sí que es una gran noticia... La relación de confianza de veinte años desaparece de la noche a la mañana, y cosas como la evaporación de activos...
Ver originalesResponder0
TokenomicsShaman
· 12-14 17:05
Esto es genial, veinte años de confianza en vano, desaparecieron en un instante, los bancos tradicionales son realmente increíbles
Ver originalesResponder0
Deconstructionist
· 12-14 16:58
Vaya, ¿puedes arruinar una relación de veinte años? Qué absurdo.
Ver originalesResponder0
ZKSherlock
· 12-14 16:58
De hecho... este es exactamente el tipo de caso que revela por qué no podemos simplemente ignorar las suposiciones de confianza en las finanzas tradicionales. ¿Dos décadas de relación significan nada cuando la arquitectura de custodia está fundamentalmente rota, verdad?
Ver originalesResponder0
SmartMoneyWallet
· 12-14 16:50
Incluso una relación de 20 años puede fracasar, esa es la vulnerabilidad de las finanzas tradicionales... Una vez que el flujo de fondos se sale de control, por muy grande que sea el nombre, no sirve de nada
Un caso destacado ha surgido de los registros judiciales: un heredero de la fortuna Hermès colocó acciones heredadas en tres instituciones bancarias suizas, confiando en la orientación de Eric Freymond, un gestor de patrimonio suizo con el que había trabajado durante casi dos décadas. Lo que siguió fue inesperado: las acciones simplemente desaparecieron. El incidente plantea serias preguntas sobre la custodia de activos y los riesgos de confiar en los sistemas bancarios tradicionales para salvaguardar participaciones sustanciales. Para quienes gestionan carteras significativas, ya sea a través de canales convencionales o digitales, el caso subraya una realidad dura: incluso las relaciones establecidas y duraderas con instituciones financieras no garantizan la seguridad. Es un recordatorio de que la confianza institucional, aunque a veces necesaria, tiene sus propias vulnerabilidades.