El problema con los contratos perpetuos es simple: puedes ganar durante días, semanas, incluso meses... acumulando ganancias, sintiéndote imparable, creyendo que has descifrado el código. pero un día malo, un movimiento incorrecto, una entrada demasiado confiada y todo se vuelve atrás. los contratos perpetuos no se preocupan por tu racha ganadora, ellos
Ver originales